People have been predic#ng the end of the world since the first century. St. Paul thought Christ would return in his life#me. Hippolytus, one of the early philosophers, predicted Christ would return in 500 A.D. In 960, German theologian, Bernard of Thuringia, calculated the end of the world would come in 992. Some were so sure the world was going to end in 1000 A.D. that they did not bother to plant crops. Astrologer, Johann Stoeffler, said the world would be flooded on February 20, 1524. Solomon Eccles, in 1665, ran through the streets of London carrying blazing sulfur on his head announcing that the world was going to go up in flames within the year. In 1874, Charles Russell, founder of the Jehovah’s Witnesses, concluded that Christ had already returned, but people would have another forty years of grace. In 1914 the denomina#on was forced to revise its #metable. Herbert Armstrong, in his publica#on, Plain Truth, set the date for the end of the world as January 7, 1972. The Year 2000, and more specifically, the projected Y2K computer problem, caused many to think that the “end was at hand.” Some people made statements such as “A United Na#ons world-takeover is imminent” and that “Y2K will be the event that they use.” Some even claimed that Jesus spoke of Y2K in His Olivet Discourse, using Luke 21:25 as jus#fica#on: “There will be signs in sun and moon and stars, and on the earth dismay among na#ons, in perplexity at the roaring of the sea and the waves.
Therefore, in the midst of all these calcula#ons and miscalcula#ons one is forced to ask a simple ques#on, “Will there be an end to this world at all?” The simple answer to this ques#on is “Yes. Because our Jesus – the Son of God has said so.” That answer necessarily leads to the next ques#on. “When ?”. Once again we refer to the words of Jesus who has said, , “ But, regarding that Day and that Hour, no one knows when it will come, not even the angels, not even the Son, but only the Father.” Mk 13:32.
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A Sunday school teacher asked his class, “If I sold my house and my car, had a big garage sale and gave all my money to the Church, would that get me into Heaven? “NO!” the children all answered. “If I cleaned the Church every day, mowed the yard, and kept everything neat and #dy, would that get me into Heaven?” Again, the answer was, “NO!” Again the teacher asked, “Well, then, if I were kind to animals and gave candy to all the children, and loved my wife, would that get me into Heaven?” Again, they all answered, “NO!” “Well then how can I get into Heaven?” A five-yearold boy shouted out, “YOU GOTTA BE DEAD!” Good insight for a five-year old!
Fr.Joseph Antony Sebastian
St. Joachim Church
21255 Hesperian Blvd Hayward, CA, USA 94541
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Nota de nuestro pastor:
La gente ha estado prediciendo el fin del mundo desde el primer siglo. San Pablo pensó que Cristo volvería en su vida. Hipólito, uno de los primeros filósofos, predijo que Cristo regresaría en el año 500 DC, En 960 el teólogo alemán, Bernardo de Turingia, calculo el fin del mundo para el año 992. Algunos estaban tan seguros de que el mundo iba a terminar en el año 1000 DC que no se molestaron en plantar cultivos. El Astrólogo, Johann Stoeffler, dijo que el mundo se inundaría el 20 de febrero de 1524. Solomon Eccles, en 1665, corrió por las calles de Londres con ardiente azufre en la cabeza anunciando que el mundo iba a arder en llamas ese año. En 1874, Charles Russell, fundador de los Testigos de Jehová, dijo que Cristo ya había regresado, pero la gente tendría cuarenta años de gracia. En 1914 la denominación se vio obligado a revisar su calendario. Herbert Armstrong, en su publicación, La Pura Verdad, fijó la fecha para el fin del mundo como el 7 de enero de 1972. El año 2000, y, más concretamente, el problema informático Y2K proyectada, causó muchos a pensar que el “fin estaba cerca. “Algunas personas lo veían inminente “y que” Y2K sería el evento que utilizaran. “Algunos incluso afirmaron que Jesús habló de Y2K en Su Sermón del Monte, con Lucas 21:25 como justificación: “Habrá señales en el sol y la luna y las estrellas, y sobre la tierra, angustia entre las naciones, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas.” Por lo tanto, en medio de todos estos cálculos y cálculos erróneos uno se ve obligado a hacer una simple pregunta: “¿Habrá un fin a este mundo en absoluto?” La respuesta simple a esta pregunta es “sí. Debido a nuestro Jesús – el Hijo de Dios ha dicho “Esa respuesta nos lleva a la siguiente pregunta.. ” ¿Cuando?”. Una vez más, nos referimos a las palabras de Jesús que ha dicho: “Pero, con respecto a ese día y esa hora, nadie sabe cuándo va a venir, ni los ángeles, ni el Hijo, sino sólo el Padre.” Mc 13, : 32.
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Un maestro de escuela dominical pidió a su clase: ” Si yo vendo mi casa y mi coche, tengo una gran venta de garaje y doy todo mi dinero a la Iglesia, ¿entraría yo al Cielo? “¡NO!” Los niños le contestaron. “Si yo limpio la Iglesia todos los días, corto el césped, y limpio y ordeno todo, ¿entraría yo al Cielo?” Una vez más, la respuesta fue: “¡NO!”, Preguntó de nuevo el maestro, “Bueno, entonces, si yo soy amable con los animales y le doy caramelos a todos los niños, y amo a mi esposa, ¿entraría yo al Cielo? “Una vez más, todos ellos respondieron:” ¡NO! ” Bueno, entonces, ¿cómo puedo entrar al Cielo?” Un niño de cinco años de edad, gritó: “Tienes que estar MUERTO!” ¡Buena idea para un niño de cinco años de edad!
Fr.Joseph Antony Sebastian
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